Karime Macías Tubilla, esposa del ex gobernador de Veracruz, Javier Duarte, será extraditada a México por supuestos fraudes cometidos en el Sistema Estatal para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF), toda vez que se ubica en Londres. 

El juez de la alta corte de Londres, Paul Goldspring, dio este jueves la razón a México y aprobó la extradición al país de quien fuera la ex primera dama e Veracruz. 

Tras el veredicto, el caso fue enviado al despacho de la secretaria de Estado, Priti Patel, quien decidirá si ordena o niega la entrega de la antigua funcionaria estatal, aunque en la práctica se considera un mero procedimiento formal. 

La defensa podrá apelar la decisión dada a conocer en la Corte de Magistrados de Westminster, recinto en el que se definen los casos más emblemáticos en manos de la justicia británica.  

Macías, de 46 años, vivió en el lujoso barrio londinense de Belgravia y fuera del radar público hasta ser identificada por autoridades veracruzanas, quienes la buscaban por graves delitos al erario público. 

Karime fue identificada retirando dinero de un cajero en Londres luego de que su marido fuera llevado prisionero, capturado en Guatemala. Posteriormente la siguieron junto con uno de sus hijos por las calles de aquella nación.

Ante esto, la Secretaría de Relaciones Exteriores señaló que durante el procedimiento de extradición, el gobierno de México aportó todos los requisitos y pruebas necesarios y que este fallo es testimonio de la excelente colaboración entre las autoridades mexicanas y británicas.

“El Gobierno de México aprovecha esta oportunidad para agradecer a las autoridades de la Fiscalía británica, en particular a la Fiscal especial Paula Craven, así como al equipo legal que representó al gobierno de México en la Corte, encabezado por el abogado Mark Summers, por su excelente labor y compromiso con el caso”

Por su parte, la Fiscalía General de la República comunicó que ganó la primera instancia, en Inglaterra, para extraditar a Karime Macías y que el Gobierno de la Gran Bretaña le dio la razón a la FGR.

Recordó que ahora tiene 30 días para apelar la decisión de las cortes inglesas, pero que la FGR continuará atendiendo este proceso en Inglaterra.