Pese a lo que dicen algunas encuestas recientes, todo apunta a que una mujer será la candidata de Morena al gobierno de la CDMX. Existe un acuerdo preliminar entre Claudia Sheinbaum y la dirigencia del partido guinda para que esa idea se materialice en la elección del próximo año. Y es que a diferencia de lo que algunos podrían pensar, no existe una condición previa en Morena para que una mujer sea candidata a la Presidencia y un hombre en la capital.

No hay conflicto en que sean dos morenistas las que jueguen en esas posiciones. En todo caso, en aras de mantener la equidad de género, la cuota de hombres y mujeres se repartirá en las demás gubernaturas en juego durante 2024: Chiapas, Guanajuato, Jalisco, Morelos, Puebla, Tabasco, Veracruz y Yucatán. Ese es el contexto en el que, desde la capital, tejen acuerdos para determinar quién será la abandera del partido oficial. Y cada vez hay más indicios de que la elegida será Rosa Icela Rodríguez, secretaria de Seguridad federal.

Si bien es cierto que las y los demás suspirantes (Clara Brugada, Ariadna Montiel, Omar García Harfuch, Martí Batres, Mario Delgado y Ricardo Monreal) cuentan con cartas credenciales y destacadas trayectorias, en Palacio Nacional y el Antiguo Ayuntamiento las preferencias están con Rosa Icela.

Ella ha dicho que en este momento no la mueve otra cosa más que el interés de ayudar y servir al presidente López Obrador, cosa que hace patente todos los días en la coordinación del Gabinete de Seguridad. Eso da cuenta de que goza de toda la confianza del mandatario. No de ahora, sino de muchos años de colaborar juntos, pero también al lado de la jefa de Gobierno, compañera de luchas y causas desde hace décadas.  Pero más allá de la camaradería, la lealtad y el compromiso, la funcionaria construyó una carrera propia con resultados, convirtiéndola incluso en la primera mujer en ocupar la cartera que ostenta desde noviembre de 2020.

Más aún, el pasado 10 de marzo fue nombrada como la contraparte del liderazgo en el esfuerzo contra el fentanilo junto con la asesora de seguridad nacional de la Casa Blanca, Elizabeth Sherwood-Randall. Fue el 5 de septiembre de 2022, cuando AMLO dijo que ella tiene posibilidad de ser corcholata para la CDMX. Es licenciada en Periodismo por la Escuela Carlos Septién, lo que le permitió laborar en diversas empresas como Televisa Radio, El Universal, La Afición y La Jornada. Antes de la cartera que ocupa hoy fue coordinadora de Puertos y Marina Mercante en la Secretaría de Comunicaciones.

De diciembre de 2018 a julio de 2020, se desempeñó como secretaria de Gobierno e integrante del Gabinete de Seguridad en la CDMX, con Sheinbaum.

Con Miguel Mancera, como jefe de Gobierno, ocupó las secretarías de Desarrollo Rural y Desarrollo Social, así como la dirección del Instituto para la Atención de Adultos Mayores.

Con Marcelo Ebrard, entre 2006 y 2009, fue coordinadora del Gabinete de Gobierno y Seguridad, así como responsable de las 70 Coordinaciones Territoriales de Seguridad y Procuración de Justicia. 

En la administración de AMLO como jefe de Gobierno, entre 2000 y 2006, fungió como directora de Participación Ciudadana y directora de Concertación Política en la Secretaría de Gobierno. Y en 2018, participó en las campañas de Sheinbaum y López Obrador, en el distrito 4 de San Luis Potosí, de donde es originaria. Potosina de nacimiento, chilanga por adopción, Rosa Icela es quien, hoy por hoy, tiene todo para convertirse en la próxima jefa de Gobierno, a menos que en su partido decidan otra cosa de último momento o la oposición ponga enfrente a alguien que pase por encima de la maquinaria de Morena en la CDMX.

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A Fuego Lento se toma unos días de vacaciones. Nos leemos el próximo 27 de marzo. 

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Y como dice el filósofo… Nomeacuerdo: “Si dices la verdad, no tendrás que acordarte de nada”.

POR ALFREDO GONZÁLEZ CASTRO
ALFREDO.GONZALEZ@ELHERALDODEMEXICO.COM
@ALFREDOLEZ