Embestida contra la oposición en la CDMX

El arresto y exhibición de Christian Von Roerich es el inicio de una cacería de brujas en la capital del país, de cara a los comicios de 2024

Alfredo González Castro

24/04/2023 - 0:00 HS

No exhibir ni someter al escarnio público a criminales, barones del narcotráfico o delincuentes de cuello blanco, hombres o mujeres, fue una política que implementó López Obrador desde que llegó a la Presidencia, pero ese principio fue violentado flagrantemente con la detención del panista Christian Von Roerich.

 

Fue arrestado en Tamaulipas cuando pretendía cruzar ilegalmente a Estados Unidos con una identidad falsa. Cabello largo, barba crecida (de semanas o meses) y un rasgado pantalón de mezclilla. El estereotipo del peor de los criminales en México y el mundo.

 

Nunca en la 4T se había mostrado con tanta saña a un presunto violador de la ley. No lo hicieron con Ovidio Guzmán ni con Emilio Lozoya. De hecho, a los capos del narco arrestados en este sexenio nunca se le dice “narcotraficantes”, se refieren a ellos como “objetivos prioriotarios”.

 

Todo fue diferente con el ex alcalde de Benito Juárez, quien era buscado por presuntos vínculos con el llamado “Cartel Inmobiliario”, pero la manera en la que se difundió su detención fue en detrimento de sus derechos humanos.

 

Con la publicación de la ficha signalética y fotografías de su arresto, dicen expertos en leyes, la autoridad pasó por encima de la presunción de inocencia y otras garantías salvaguardadas por la ley.

 

Sin un juicio de por medio, lo mostraron ante la opinión pública como un criminal.

 

Y está claro que en este caso se aplicaron dos criterios: el jurídico y el político.

 

En el primer rubro, todavía tiene que demostrar la Fiscalía si el panista es culpable o no por el delito de uso ilegal de atribuciones y facultades cometidos por servidores públicos, además de asociación delictuosa.

 

En el terreno político está clara la intención de la 4T: demostrar a los capitalinos que el PAN se convirtió en la cueva de Ali Babá y los 40 ladrones.

 

Para los gobiernos de Claudia Sheinbaum y López Obrador, los panistas tejieron una red de corrupción con el boom inmobiliario de sexenios anteriores y quienes dominan al partido azul hoy en día forman parte de esa maraña de corruptelas.

 

Además de Christian Von, están en la cárcel sólo tres ex trabajadores de la alcaldía. Ninguno ha recibido sentencia y su proceso sigue abierto.

 

Pero en lo que la 4T demuestra quién es culpable o inocente, tienen ya el mejor discurso de cara a la elección del 2024: “Los panistas son corruptos y ladrones”, machacarán hasta el cansancio.

 

La razón es bien simple: recordemos que ellos, encabezados por el diputado Jorge Romero, arrebataron en 2021 parte de la CDMX a Morena.

 

Aliados con PRI y PRD, les quitaron nueve alcaldías, diputaciones federales y una parte importante del congreso local.

 

Y por la tendencia que prevalece en la ciudad, existen altas posibilidades de que el partido guinda sufre otra derrota en los próximos comicios.

 

Razón poderosa también para que la Fiscalía de Ernestina Godoy intensifique las investigaciones contra los del blanquiazul.

 

Pero más aún (como lo dije en una columna de hace unos meses), AMLO entrará a poner orden en la campaña de la CDMX, porque no dejará que la oposición se la quite de las manos.

 

Veremos en los próximos días otros señalamientos directos de la autoridad y Morena contra las alcaldesas de Alvaro Obregón y CuauhtémocLía Limón y Sandra Cuevas, así como contra sus pares de Miguel Hidalgo y Benito JuárezMauricio Tabe y Santiago Taboada.

 

El gobierno, me dicen desde Palacio Nacional, no escatimará recursos para exhibirlos, por lo que en breve habrá importantes anuncios sobre actos de corrupción y serias irregularidades, de entrada, en las demarcaciones de Lía y la polémica Sandra Cuevas.

 

***

Y como dice el filósofo… Nomeacuerdo“La política se trata de en encontrar soluciones a los problemas, no de demonizar a tu adversario”

Compartir:

Últimas Noticias

Lo más leído