Alfredo González Castro
25/10/2023 - 7:00 HS
Aunque públicamente no ha dicho “esta boca es mía”, en Morena y Movimiento Ciudadano dan por hecho que Marcelo Ebrard optará por el partido naranja y aceptará ser su candidato presidencial.
Se medirá en un proceso interno con Samuel García, una vez que el gobernador de Nuevo León libre todos los obstáculos jurídicos para dejar a su sucesor e irse de campaña.
Con esta maniobra, MC y Dante Delgado tendrán dos “fuertes” aspirantes a la Presidencia de la República.
Pero más allá de las posibilidades reales que tiene cualquiera de los dos para ganar la elección de 2024, la realidad es que uno de ellos llegará a la final para debilitar al Frente Amplio por México, conformado por PRI, PAN y PRD.
Según las encuestas más recientes, MC está reconocido como la tercera fuerza política en este momento y los votos que logre captar no llegarán de los seguidores de Morena o del Presidente.
Llegarán de los priistas, panistas o perredistas inconformes o rebeldes que no están de acuerdo con la alianza que hicieron Alejandro Moreno, Marko Cortés y Jesús Zambrano. Y los menos serán votos de castigo contra de la 4T.
Bajo este panorama, en la Presidencia de la República están de manteles largos por el hecho de que Samuel sea candidato, pero más si Marcelo consigue la nominación.
La razón es simple: AMLO tendrá un segundo candidato presidencial con cualquiera de ellos en la boleta electoral.
Y es que para nadie es un secreto el trato preferencial que ha dado el mandatario a Samuel, en obras y presupuesto, como tampoco ha sido un secreto el trato que ha obsequiado al hijo rebelde de la 4T.
Según lo dicho en sus apariciones públicas más recientes, el excanciller sólo espera que los órganos de Morena resuelvan sus impugnaciones para decidir su futuro.
Pero no se necesita de una pitonisa para adivinar lo que pasará: el partido bateó sus inconformidades y eso hace suponer a las huestes de Mario Delgado que tiene un pie fuera.
En términos estrictos, se dará una ruptura con Morena para después alistarse en MC, donde bajo las condiciones de Dante se medirá con Samuel, visto por los morenistas como un rival mucho menor.
Es decir, de haber estado en el roof garden de la política y batirse en un duelo con personajes como Claudia Sheinbaum, Adán Augusto y Ricardo Monreal, Ebrard se fue al sótano.
Para muchos de sus detractores, perdió el piso y se está hundiendo por soberbio, con todo y que la ex jefa de Gobierno le abrió las puertas para que volviera.
Esa visión, sin embargo, es una lectura parcial de todo lo que hay alrededor del excanciller porque, como lo decimos más arriba, convertirse en el candidato de MC será de gran utilidad para la 4T.
Ahí se encuentran las razones por las que AMLO no lo maltrata como a otros y nadie lo ataca como a los verdaderos enemigos del partido guinda.
Si esta posibilidad, la de contar con dos candidatos, se le ocurrió al Presidente, no cabe la menor duda de que es un genio y hay personajes como Samuel, Dante y Marcelo que están dispuestos a hacerle el juego.
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EL FRENTE AMPLIO POR MÉXICO sigue enredado con el método para elegir a sus candidatos a ocho gubernaturas y el Gobierno de la CDMX.
Prevén que con la resolución de ayer del INE (que los obliga a postular cinco mujeres y cuatro hombres) se “facilitarán” las cosas, aunque lo cierto es que, en el caso de la capital del país ya saben que un panista será su abanderado.
Lo que no logran amarrar son los premios de consolación que darán a las huestes de Alito Moreno, Marko Cortés y Jesús Zambrano.
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Y como dice el filósofo… Nomeacuerdo: “La segunda opción es como un borrador para la vida: te da la oportunidad de rectificar tus errores”.
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