Un perro robot será el nuevo encargado de cuidar la frontera entre México y Estados Unidos. 

Este nuevo prototipo forma parte de las nuevas acciones que ambos gobiernos pactaron para “prevenir el tráfico de drogas, armas y vida silvestre, el tráfico ilícito de migrantes y la trata de personas”. 

El Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por su siglas en inglés), que encabeza Alejandro N. Mayorkas, anunció que el perro robot apoyará en las labores de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP). 

Con esto se busca elevar la seguridad en la frontera con México donde “son muchos los tipos de actividades ilegales”.  

“La frontera sur puede ser un lugar inhóspito para el hombre y la bestia, y es exactamente por eso que una máquina puede sobresalir allí”, dijo la gerente del programa S&T, Brenda Long. 

El perro robot pesa 100 libras y fue construido para el tipo de trabajo de la CBP porque atraviesa todo tipo de terreno natural, incluyendo arena, rocas y colinas, explicó su creador, Gavin Kenneally, director de productos de Ghost Robotics. 

Por su parte, el agente Brett Becker, del Equipo de Innovación de CBP, destacó que “a lo largo de la frontera puede haber contrabando de personas, de drogas, de armas de fuego o incluso potencialmente de destrucción masiva, por parte de un solo individuo hasta organizaciones criminales transnacionales, terroristas o gobiernos hostiles”.  

Por ella, la S&T ha trabajado con los especialistas del CBP y de la empresa durante dos años y medio para definir especificaciones y pruebas de capacidad del perro robot que cuenta con paquetes de video, sensores y radios para transmitir en tiempo real datos críticos.